Objetivos:
- Practicar la relajación.
- Conocer los beneficios de la relajación.
Actividades:
1. Relajación de los sentidos.
La profesora explica que la sesión de hoy va a ser un regalo y que intenten aprovecharla al máximo. Comenta que vamos a hacer un recorrido por cada uno de los cinco sentidos. Se apaga la luz y se bajan algunas persianas. Se insta al grupo a que se siente de manera cómoda y cierren los ojos. Se pone música relajante y la profesora comienza la relajación:
- “Primero vamos a comenzar por el sentido del oído. Ponemos toda nuestra atención en el sentido del oído…”
- “Pasamos al sentido de olfato. Respiramos lenta y profundamente atendiendo a las diferentes fragancias que llegan a nosotros/as” (colonia de bebé, comino, desodorante, curri…). “Algunos olores nos evocarán recuerdos otros no, unos nos gustarán más que otros…”
- “Nos centramos ahora en el sentido del tacto. Van a pasar por nuestras manos, brazos, cara, cuello diferentes texturas (boa de plumas, peluca de payaso, esponja…) y vamos a poner toda nuestra atención en el tacto mientras respiramos lenta y profundamente…”
- “Pasamos al sentido del gusto. Ponemos la mano sobre la mesa con la palma de la mano hacia arriba y nos llevamos lentamente a la boca lo que va llegando hasta nosotros (lacasitos, gominolas, cacahuetes, gusanitos…) y lo saboreamos lentamente…”
- “Para terminar nos vamos a poner toda nuestra atención en el sentido de la vista pero de manera imaginada. Seguimos con los ojos cerrados y nos imaginamos en un lugar maravilloso, cada uno en el que quiera y nos fijamos en los colores, las formas, en quien nos acompaña….”
2. Reflexión final
Reflexión sobre cómo influye el que estemos ansiosos o tranquilos en nuestra relación con los demás, en nuestro estado de ánimo y en el rendimiento académico.