La familia como agente de socialización

  Conceptualmente la familia se define como un grupo primario unido fundamentalmente por vínculos consanguíneos y de afecto. Es considerada también como una institución básica y fundamental de la sociedad, orientada y organizada para responder y satisfacer los requerimientos de sus miembros, vinculándolos con el mundo social, posibilitando así la internalización, recreación y perpetuación de la cultura por medio del proceso de socialización.

La familia es un sistema fundamental para el desarrollo de los niños y adolescentes, sin olvidarnos de los grupos de iguales y la escuela como importantes agentes de socialización. Es en la familia donde se encuentran los primeros individuos que juegan un papel importante en el desarrollo social del niño y la niña. Los progenitores guían directa o indirectamente a sus hijos a adquirir las primeras habilidades que le serán de utilidad para relacionarse con los demás.

“La familia proporciona lo que consideramos condiciones óptimas para el desarrollo de la personalidad de los individuos jóvenes, por lo que se puede y se debe familia de patosdecir que la familia conyugal, no tanto la parentela, tiene entre otras funciones la de ser un buen instrumento para la transmitir las tradiciones, costumbre, usos y convicciones de una sociedad, a los recién nacidos y a las generación más jóvenes” (González, 1987, p. 53).

La influencia de las relaciones familiares son determinantes para el futuro desarrollo del niño y del adolescente. El estilo educativo de los padres, sus actitudes ante la vida, las mismas relaciones de los progenitores entre ellos, y su concepto de cómo deben ser educados los hijos, modulan el desarrollo efectivo y social del niño y del adolescente.